lunes, 29 de diciembre de 2014
SINOPSIS STYLE (HOMENANGEL)
Bueno chiquines y chiquinas pues me he leído "El francotirador paciente" y os voy a contar un poco.
El autor de Alatriste se dijo un día "Como estoy muy cabreado continuamente y necesito desestresarme pero no puedo irme a putas que si me pillan se me hunde el chiringo, y menos hacerme una gayola, que tengo yo el ego muy crecido y estoy muy mayor para según que cosas..me voy a dar un voltio. Pero no uno cualquiera, no. Uno cinturón negro. Que me apetece un paseo por Europa hombre. Que me lo tengo ganado. Una temporadita en Lisboa, Roma, Verona, Nápoles.. A ver si me lo financian si digo que voy a documentarme. Y con esas me voy de restorans y hoteles de cinco estrellas pol mundo-world". Y se lo montó bandera. Como la chica de la historia que va a gastos pagaos y no se priva de na. Que deja la tarjeta del mecenas que la contrata más blanda que los relojes de Dalí.
Luego va y por rellenar para que no le puedan decir que no hizo nada escribe 200 folios sentado en la taza del vater y cuando termina de echar la mierda va y acaba de cagar. ..Y los manda por mail a la editorial... y se lo publican. Otros idiotas a los que su prosa nos tiene enganchados (porque mira que engancha el jodío) esperanzados en que, como Curro Romero, tenga una tarde antológica entre cien bodrios, lo compramos para leerlo y alcanzar la conclusión de que nuevamente nos ha hecho trampa y habrá que esperar otra corrida de gloria pues en esta no sale a hombros ni apuntándose a un castellet.
La prota es una de esas tipas que tanto le van al Reverte que tienen conversaciones intensas mientras con la otra mano levantan mancuernas. Que te ponen palote a la vez que podrían ser tu colega de cacería en un guateque o una boite. Y más en este caso, en que ligaría más que tú a poco porque le va el pescao.
Pero es que para dar más carácter al personaje y terminar de definirlo es experta en algo, fuma sin filtro y dice cosas como "machacarte los güevos" y "Rene Magritte" en la misma frase. Vamos, como otros cienmil personajes femeninos del escritor.
En este caso es una autoridad en arte y libros (¡Anda otro tema nuevo en su universo!) y sabe dar hostias como panes, que lo aprendió en la patrulla de las garzas de la tropa 7 de las girl scouts en Aluche. Y todo eso sin que se te quiten las ganas de reconvertirla al lado oscuro de la fuerza. Que es decir de su bollerismo y tú venirte arriba. Y lo sabes.
La cosa va de grafiteros, que en la jerga resulta que se llaman "escritores" entre ellos y que no son, como todos creíamos, unos vándalos a los que les pone esnifarse su propio aerosol mientras destrozan el mobiliario urbano, sino una organizada red tribal de románticos y orgullosos guerrilleros del anarquismo que cambian las pistolas y bombas por las bolitas del spray con el que dejan su firma y la expresión de su arte en el cierre metálico del pescadero del barrio (Y es que soy un viejuno y un pureta que como poco voto a VOX y no entiendo las intervenciones con que muestran su desgarrada inadaptación desde la compleja mirada de la cultura hip-hop)
En realidad es todo una excusa para montarse una persecución molona por medio viejo continente en la que sobran 180 páginas de descripciones de callejuelas, alojamientos a medias entre lo vintage, lo cool y lo canalla, y terrazas con vistas a la aventura.. pero ¿de qué otra manera se iban a justificar aquellas facturas en la fase de recopilación de información ante el editor si no?
El resto de personajes como siempre, increíblemente increíbles y magistralmente esbozados de forma tal que sean creíbles gentes como un seguidor de Nietszche que elige los destrozos a monumentos como muestra de su genio o una pareja de guírís estrambóticos como asesinos a sueldo que se aman desde sus gabardinas y sus ropas de caza en medio de la urbe y los navajazos. Por aparecer aparece hasta el dueño de Zara (Atención: Spoiler) que es más malo que un funcionario antes de desayunar y que es lo que le da la calidad al libro.
Luego hay un final abrupto, cosa que sorprende en este autor (modo ironía on) y ya. Que yo creo que Cervantes se adelantó describiendo en su época la forma en que Reverte acaba muchas novelas cuando dijo lo de "..miro al soslayo, fuese, y no hubo nada." Pero como es una novela y no un artículo al menos no termina diciendo "..ciscarme en la madre que los parió" ni nada asín. Así que, qué se le va a hacer zangolotinos, a esperar que la siguiente toque ya que no esta. Como siempre. Y es que los lectores de Pérez-Reverte somos un poco yonki-sufridores, como los del Atleti. Y a los que nos gusta escribir además jodidamente envidiosos.
Os la recomiendo si os gusta esnifar pintura en aerosol o ver como otro recorre el mundo.
(Con admiración imitativa)
Randy
Nota: ¡¡Ah, y comprad el libro de Sinopsis de Cine ya, como yo lo he hecho. Sabandijas!!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario