martes, 25 de febrero de 2014

ME TOCA LAS PELOTAS

Entrada escrita con la única finalidad de desahogarme. No persigue ningún otro objetivo (denuncia social, adhesión, enemistad..)

Me gusta el colegio al que llevo a mis hijos. Por eso les llevo ahí. Creo que tiene ciertas características que a mí me vinieron bien y creo que a ellos también pueden servirles. Como padre creo estar formando parte de una comunidad educativa y además soy de los que piensan que a mis hijos les educo yo y el centro escolar me ayuda en esa tarea (muchísimo, pero el responsable soy yo).

..Y con aquellos aspectos que estoy menos satisfecho con estar vigilante y quejarme en su caso a través de los canales de que dispongo para ello es suficiente. Tener estos canales ya es buen indicio de calidad. Sin embargo algunas veces hay temas que me superan.


Recientemente una profesora recibió un balonazo y ha sido más duro de lo habitual. Lo lamento. Siento el daño que ha sufrido y los problemas que le ha podido acarrear.


A raíz de ello a un profesor (curiosamente su pareja) se le ha ocurrido iniciar una campaña para que no se permita jugar a los niños en el recreo a baloncesto. La razón: que los balones son duros y pueden, pateados con fuerza con el pié golpear a algún profesor o alumno. Flipas. Ya estaban prohibidos hace tiempo los balones de futbol de reglamento.


Pues con un par. Ha llegado, lo ha propuesto en el claustro, ha salido que sí y lo están aplicando. Y la dirección del centro muda para que no haya mal rollo.


¿A alguien se le ocurre mayor aberración para con unos niños que prohibirles jugar a la pelota? Y más viniendo de un docente y en un patio de un centro educativo.


Se argumenta con base a cuestiones de prevención de riesgos laborales, de costes, de mutuas,..


Pero vamos a ver ¿quien no ha recibido un pelotazo en el patio de un colegio? ¿cuantas lesiones graves se han producido? (que no digo que no las haya, digo que la probabilidad y la severidad del daño no son relevantes ya que nos ponemos prevencionistas), ..


.. pero sobre todo digo.. que es que va en el oficio.. que no hablo de carteros, hablo de maestros y profesores.. gente que trata con niños.. que cuida patios en los que estos juegan.. que los niños juegan a la pelota...deben hacer deporte..moverse.. divertirse..educarse también en el patio..


... que mis hijos tienen derecho a jugar al baloncesto en las canchas del patio porque son niños y les gusta el baloncesto.. y eso está por encima de una probabilidad infinitesimal de que te de un pelotazo en la cara.. y si no lo entiendes has equivocado tu profesión.


Claro que es el mismo centro concertado en el que los más de mil alumnos cada día tienen que pasar varias veces para subir o para bajar desde sus clases por debajo de un pollo símbolo del régimen anterior a la democracia de dos por dos en una cristalera. Pero ese es otro tema y merece entrada en este blog aparte.


Lo dicho. Me gusta el centro educativo al que llevo a mis hijos. Por eso les llevo ahí. Está lleno de buenos profesionales de la enseñanza y cuenta con medios que hacen que esté a la cabeza de los resultados educativos de la Comunidad y del país en términos de resultados académicos.. pero hay temas a veces que me superan.

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