Don Zacarías R. Flores (No he conseguido averiguar que significa la R. Ya he entregado mi dimisión al director del blog, pero me parece que os estáis pasando con lo del rigor periodístico y lo de contrastar las fuentes.. estoooo... ¿por donde iba? Que es que me distraéis..Ah, si..) .. es un viejecito que lleva diecisiete años atravesando el puente. Y no me refiero a que lo haga a diario para ir de A a B y vuelta, no, no.. en la misma dirección.. aún no ha llegado al otro lado desde que salió.
Hace noche apoyado en su cayado (en la foto estaba desperezándose para empezar esa mañana a andar). Y hay días (no uno ni dos, sino muchos) en que acaba la jornada y está más atrás de donde empezó. Este curioso fenómeno aparentemente inexplicable ha atraído al lugar a científicos del mundo entero interesados en estudiar la que han bautizado como "Paradoja de Romerales" (¡¡Aaaaaaah, claro. Romerales.. eso es la R!!)
" -El otro día me meó un perro" - denuncia ante nuestros micrófonos don Zacarías. Y es que hay gentes en la localidad que se han enterado ahora de su presencia. Carlos, es un niño rubio y gordito que estudia tercero de primaria. Nos dice asombrado que creía que era una estatua o algo así. Le extrañaba que unos días estuviera unos centímetros mas allá pero lo achacaba al clima local que es muy voluble.
La marcha de nuestro protagonista es tan imperceptible, apenas milimétrica, que no cabe hablar de "andar". El anciano ha bautizado a esta práctica como "reflexióning".
En estos diecisete años don Zacarías ha olvidado para qué salió pero por contra se ha sacado la carrera de filología francesa por la universidad a distancia, un doctorado, dos masters y se ha casado dos veces.
"- La humedad es lo peor." - contesta a las preguntas de este reportero.
La familia, preocupada, anunció ayer que seguramente (aún está por decidir), denuncien su desaparición en breve si siguen sin tener noticias suyas en uno o dos días.
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